GIMNASIA PASIVA
LA ELECTROESTIMULACIÓN - TONIFICAR MUSCULATURA
También conocida como gimnasia pasiva, es una técnica en la que se utiliza corriente eléctrica para provocar contracciones musculares, en donde el impulso eléctrico estimula la fibra muscular a través del nervio motor.
Desde hace muchos años se le utiliza en medicina deportiva y rehabilitación. En principio tenía la finalidad de recuperar los músculos atrofiados por una lesión, pero poco a poco ha ido evolucionando para emplearse también en los ámbitos de la estética y el deporte.
La electroestimulación tiene efectos positivos en el trabajo muscular durante la recuperación sin involucrar las articulaciones, para restablecer el control propioceptivo, eliminar contracturas, y ayuda en la recuperación de la fatiga muscular.
VENTAJAS DE LA ELECTROESTIMULACIÓN Se consigue mayor activación muscular que con la contracción voluntaria. No produce fatiga del sistema nervioso central, por lo que podemos hacer más repeticiones. La tensión se mantiene durante más tiempo que con una contracción voluntaria. Al tener mayor volumen de trabajo, obtenemos mayor aumento de la masa muscular en menos tiempo.
CUÁL ELECTROESTIMULADOR USAR
Debemos utilizar un aparato de baja frecuencia, de 1 a 120 Hz, que asegure una contracción muscular potente, visible y fisiológica, exenta de sensaciones eléctricas desagradables y que no produzca irritaciones o quemaduras en la piel.
Los estimuladores musculares pueden tener varios pares de canales o vías de salida de la corriente, cuantos más canales tenga nuestro aparato mayor será el número de grupos musculares que podremos a tratar, sobre todo si el equipo tiene la capacidad de ejecutar dos o mas programas distintos al mismo tiempo.
ALTA FRECUENCIA
IONTOFORESIS O IONIZACIÓN SUPERFICIAL
La acción de las corrientes de alta frecuencia sobre el cuerpo humano es bien conocida. Empleando electrodos o tubos de vidrio que en su interior acumulan determinados tipos de gas, se logra que, al aplicarse sobre la piel, se generen infinidad de pequeñas chispas, las que a su vez, originan un efecto de micro-masaje y una dosis mínima de radiación ultravioleta, produciéndose así un enrojecimiento cutáneo (eritema) por aumento del flujo sanguíneo, así como de la temperatura en forma localizada (hipertermia), facilitando de esta forma el aumento de la nutrición y oxigenación de la piel, estimulándola y haciéndola recobrar paulatinamente todos los valores nutritivos y metabólicos. Por este medio se combaten eficazmente alteraciones y desequilibrios del tipo senil y prematuro a nivel cutáneo (arrugas, piel apergaminada, pérdida de humectación natural, déficit sanguíneo.)
Por su mecanismo de acción, al ser aplicado sobre la piel, el electrodo de vidrio genera infinidad de pequeñas chispas y radiación ultravioleta, que dan formación al gas ozono. El ozono produce lipoperoxidación de las grasas, atacando los lípidos de la superficie cutánea que se encuentran en el cuero cabelludo y la piel. De este efecto surge la potente acción bactericida además del incremento de la temperatura y vaso dilatación local, con el consecuente aumento de la irrigación, oxigenación y nutrición de los tejidos tratados.
Para una aplicación segura se recomienda utilizarlo con movimientos de rotación hasta observar hiperemia y/o eritema localizado.
La alta frecuencia es un tratamiento estético de belleza que tiene propiedades muy beneficiosas para la piel.
Está indicada en tratamientos estéticos tanto faciales como corporales. Todas las limpiezas de cutis la incluyen.
La esteticista utiliza la alta frecuencia después de la extracción dado que cierra los poros que se han abierto con el vapor para trabajar más profundamente. Es bactericida y también descongestionante.
Gracias a su acción activadora y desinfectante, la alta frecuencia se recomienda en tratamientos capilares, pieles con impurezas o grasas y también en pieles átonas, desvitalizadas y como complemento del masaje reafirmante, por su efecto tónico y estimulante.
En tratamientos de acné, la alta frecuencia cauteriza pústulas y evita la proliferación de bacterias y hongos.
Debido a que ayuda a bajar la inflamación y las rojeces, la alta frecuencia es esencial en limpiezas de cutis, en pieles irritadas y congestionadas.
Su aplicación no es dolorosa. Es un tratamiento totalmente indoloro. Las personas sometidas al tratamiento de alta frecuencia experimentan un suave cosquilleo los primeros minutos.
¡¡¡ Empieza ya a usar la alta frecuencia en tu centro de belleza!!!